LA CULTURA DE LOS MAKERS Y LAS FUENTES ABIERTAS
Un par de década atrás comenzaron a surgir miles de nuevos sitios de internet y foros de discusión con el objeto de aprender de la experiencia de otros y mejorar los procesos de trabajo propios. Este intercambio con extraños ha pasado a revolucionar la era en que vivimos con la referida cultura de los makers.
Aficionado: adj. Que cultiva algún arte, deporte, etc., sin tenerlo por oficio°
Maker es un término anglosajón equivalente en castellano a un hacerdor, creador, un fabricante o productor, en otras palabras el que hace o genera algo. Se denomina makers a un conjunto de aficionados que participan en el desarrollo de todo tipo de nuevos productos. La peculiaridad que esta comunidad presenta es que su colaboración es en línea. Comparten los progresos de sus proyectos, intercambian información, suben tutoriales para que alguien más pueda perfeccionar sus inventos y así compartirlos de nuevo. Los makers son un nuevo paradigma de la industria que no busca beneficiarse económicamente de sus inventos pero sí ayudar a otros con ellos.
Esta comunidad desarrolla inventos y productos por el deseo mismo de crear. La mayoría de los casos no se ven beneficiados económicamente, pues no están bajo contrato de ninguna compañía en particular. Quizá algunos tienen un empleo, otros no, pero eso no importa. Todos ellos son aficionados sin otro interés que el de demostrar sus habilidades y conocimientos a partir de la colaboración libre. El movimiento de los makers se fundamenta en el hobby, en la recreación de garage, pero lo más interesante es que actualmente se está convirtiendo en una fuerza económica.
¿Cuál es el motor?
Más de uno se preguntará ¿qué impulsa a estos individuos a seguir co-creando?
La web le permite a la gente demostrar lo que sabe, independientemente de sus títulos universitarios u otras credenciales. Permite que se formen grupos y trabajen juntos fuera del contexto de una compañía, ya sea con empleos o sin ellos. Muchos de ellos tienen otros empleos y contribuyen no por dinero sino en calidad de voluntarios globales de un proyecto en el que creen.
Esta es la respuesta* de Chris Anderson, ex director de la revista WIRED y fundador de 3D Robotics. Tal como él mismo lo relata en sus conferencias, la innovación de fuentes abiertas es una herramienta que no cuestiona el talento. Permite trabajar de forma opuesta a la de una empresa tradicional, en donde todo necesita pasar por procedimientos legales y burocráticos para ser aprobado. Además los proyectos se desarrollan con una mayor facilidad y rapidez que cuando se gestionan mediante la investigación privada.
Por su parte, Chris Anderson es un pionero en el movimiento maker. El renunciar a su empleo como director de WIRED para asociarse con un joven mexicano aficionado de la tecnología –sin papeles ni título académico– y crear la empresa número 1 de drones en el mundo es uno de sus más grandes logros. Su ideología se fundamenta en la colaboración de fuentes abiertas y cree firmemente que una comunidad de voluntarios puede lograr grandes resultados cuando la pasión y el interés por ayudar están de por medio.
Otro gran ejemplo de esta comunidad de makers es el joven Easton LaChapelle. Con apenas 19 años, LaChapelle ha creado la siguiente generación de prótesis inteligentes. Sus logros se han llevado a cabo bajo el mismo procedimiento de intercambio en fuentes abiertas. Este joven argumenta que su principal motivación para desarrollar sus inventos es ayudar a los demás. Un encuentro con una niña cuya prótesis había costado cerca de 80 000 dólares lo marcó a tal grado que decidió emprender su proyecto de vida: de forma autodidacta, comenzó a explorar las impresoras 3D, la robótica y la programación.
En conjunto con sus compañeros de clases formó un laboratorio casero en donde gran parte de los materiales eran cables reciclados, legos y otro tipo de objetos que con su creatividad adaptaban para distintos usos. De esta manera Easton creó una prótesis que reacciona a las señales que le envía el cerebro y puede ser controlada a través de una diadema que se coloca en la cabeza. Easton bajó el costo de una prótesis de 80 000 dólares a 400 dólares imprimiendo sus propias piezas con impresoras 3D y dando un segundo uso a los materiales.
Transformando la industria de masas
Esto para decir que mientras una parte del planeta aún se rige por la mentalidad del experimento oculto que dejará millones de dólares o por la noción de que las ideas deben mantenerse en secreto, ya existen individuos que trabajan unidos intercambiando know-hows, colaborando con desconocidos al otro lado del mundo, inventando y reinventando la manera en que nos relacionamos laboralmente.
Esta cultura ha dado un paso adelante abriendo un parte aguas en la historia, en donde la industria de masas se desvanece a favor de una producción personalizada de bienes.
Una comunidad de talentos que colabora y desarrolla nuevos productos a gran velocidad y de forma gratuita. Una comunidad dedicada, que hace lo que le apasiona para beneficiar a todos y a ellos mismos. Una comunidad que genera productos de gran calidad, más económicos y al alcance de más personas. Una comunidad que ha decidido dejar de consumir y limitar para crecer y crear. La nueva revolución industrial está sucediendo y los makers están en la vanguardia de ello.
Por Ilimon
° Diccionario Wordreference en línea
* Para profundizar más en el tema lee la entrevista completa aquí http://ow.ly/JNn0N
Otras fuentes: http://www.barnesandnoble.com/review/makers-the-new-industrial-revolution